Otros

Desde de la Plaza Luis Cipriano, por la calle Coimbra, entre en la espaciosa y elegante Plaza de la República encuadrada por los edificios del Ayuntamiento (siglo XVIII). Las armas de la ciudad de Aveiro se encuentran grabadas en el frontón rematado por la torre del reloj.

También destaca el Teatro Aveirense (1947) y el bellísimo pórtico clásico de la iglesia de la Misericordia. La figura que se yergue sobre un pedestal es la del gran tribuno José Estevão (1809-1862), en la pose oratoria que le dio el escultor de la obra, Simões de Almeida.

Siga por la calle de los Combatientes de la Gran Guerra (antigua calle Direita), muy interesante por el trazado de sus edificios y por la función de nexo que ejerce en la estructura urbana de Aveiro, hasta la Plaza del Marquês de Pombal. Aquí sobresale la casa de Santa Zita por sus excepcionales azulejos, la iglesia de las Carmelitas y el palacete de los vizcondes Almeidinha, reconstruido, tras un violento incendio en la década de los 40.

En la avenida de Santa Joana Princesa, el Museo de Aveiro ocupa parte de las dependencias del Convento de Jesús y da cobijo a piezas de excepcional interés y valor, que incluyen el magnífico mausoleo de la Infanta Princesa Joana. Más adelante se encuentra la iglesia de S. Domingos, sede del obispado de Aveiro. Continuando por la Avenida Artur Ravara encontrará el Parque del Infante Don Pedro, espacio apacible y de frondoso arbolado, que acoge un lago artificial en el que podrá alquilar barcos de recreo. Aquí podrá asimismo pasear y visitar el Museo de Caza y Pesca. En las inmediaciones del Parque se sitúa la Universidad de Aveiro, con edificios diseñados por algunos de los arquitectos contemporáneos portugueses de más prestigio.

Imagen cedida por Miguel Lacerda