Avis
Avis
Localidade
Esta pintoresca aldea del Alentejo, con sus calles estrechas y casas encaladas, guarda la memoria de la antigua y poderosa Orden Militar de Avis. Después de haber sido conquistada a los árabes en 1211, D. Afonso II donó la tierra a Fernando Anes, Maestro de los Frailes de Évora, futura Orden de Avis, con el propósito de poblarla y erguir el castillo, obra que se llevó a cabo entre 1214 y 1223. Al hacer la visita turística al pueblo encontrará tres de sus seis torres originales: Torre de la Reina, de Santo Antonio y de S. Roque, así como algunos trozos de muralla medieval que se funden con las casas del pueblo. En lo alto del monte de granito, rodeado por las aguas de una ribera, nacía Avis, bajo la sombra protectora del Convento de la Orden que le dio nombre.
Acceda al Largo do Convento por la puerta de la Vila, junto a la Torre de la Reina, que ofrece una bonita vista panorámica de la extensa llanura que se pierde de vista.
En este centro histórico, visite la iglesia y parte de las dependencias del antiguo convento de la Orden Militar de S. Bento de Avis que se encuentran restauradas. El edificio contiguo, hoy ocupado por los "Paços do Concelho", en tiempos pasados formó parte de la residencia de los Maestros de la Orden. Girando a la izquierda, encontrará frente a las escaleras del jardín Municipal, el original "pelourinho", decorado con máscaras y caras deformes. El conjunto está coronado por un águila con las alas extendidas, símbolo del pueblo. En esta zona también merece una visita la iglesia principal (s. XV), cuyo interior está recubierto de azulejos policromos del s. XVII.
Déjese llevar por el encanto de las calles estrechas con sabor medieval y por la blancura de las paredes de las pequeñas casas de arquitectura alentejana y descanse en el pequeño pero encantador Jardín del Mestre de Avis, recorriendo con la mirada el pueblo a sus pies y la inmensa llanura.
En los alrededores, no deje de visitar el embalse de Maranhão, obra de los años 50 destinada a regadío, donde pueden practicar varios deportes. El mirador permite disfrutar de una magnífica vista sobre las aguas de este lago artificial y sobre los pastos y senaras que lo rodean.
Acceda al Largo do Convento por la puerta de la Vila, junto a la Torre de la Reina, que ofrece una bonita vista panorámica de la extensa llanura que se pierde de vista.
En este centro histórico, visite la iglesia y parte de las dependencias del antiguo convento de la Orden Militar de S. Bento de Avis que se encuentran restauradas. El edificio contiguo, hoy ocupado por los "Paços do Concelho", en tiempos pasados formó parte de la residencia de los Maestros de la Orden. Girando a la izquierda, encontrará frente a las escaleras del jardín Municipal, el original "pelourinho", decorado con máscaras y caras deformes. El conjunto está coronado por un águila con las alas extendidas, símbolo del pueblo. En esta zona también merece una visita la iglesia principal (s. XV), cuyo interior está recubierto de azulejos policromos del s. XVII.
Déjese llevar por el encanto de las calles estrechas con sabor medieval y por la blancura de las paredes de las pequeñas casas de arquitectura alentejana y descanse en el pequeño pero encantador Jardín del Mestre de Avis, recorriendo con la mirada el pueblo a sus pies y la inmensa llanura.
En los alrededores, no deje de visitar el embalse de Maranhão, obra de los años 50 destinada a regadío, donde pueden practicar varios deportes. El mirador permite disfrutar de una magnífica vista sobre las aguas de este lago artificial y sobre los pastos y senaras que lo rodean.