Beja
Localidade
En el lugar donde se sitúa Beja existen indicios de ocupación desde tiempos remotos, aunque de hecho fue la dominación romana la que más aportó a su desarrollo. Fue aquí que, en el siglo I a. C., Julio Cesar firmó un tratado de paz con las tribus Lusitanas que ocupaban el territorio. Este lugar pasó a llamarse entonces Pax Julia y fue erigida capital jurídica y administrativa.
El trazado urbano actual de Beja tiene su base en las construcciones de la ciudad romana, y las puertas de Évora y Mértola indican las antiguas entradas en las murallas de la época. El crecimiento económico se demuestra por la gran cantidad de piezas arqueológicas allí descubiertas, que se pueden contemplar en el Museo Regional Reina D. Leonor. Muy cerca de Beja, la Villa Romana de Pisões nos muestra, de una forma más real, como vivía una familia romana durante ese período.
En el siglo VI, los visigodos ocuparon el territorio y permanecieron aquí hasta el siglo VIII cuando fueron derrotados por las tribus musulmanas que conquistaron el Sur de la Península Ibérica. Una visita al Núcleo Visigodo del Museo Regional, alojado en la Iglesia de Santo Amaro, es imprescindible para conocer la aportación de la cultura visigoda a la ciudad que fue su sede episcopal.
Desde el inicio de la Reconquista Cristiana en el siglo XII, Beja vivió tiempos agitados. Conquistada por primera vez por los cristianos en 1162, sufrió varios ataques de los musulmanes y sólo alcanzó la paz definitiva en 1253 con el rey D. Afonso III, quién reconstruyó la villa, le concedió carta foral (1254) y recuperó su importancia económica. A fin de siglo, el rey D. Dinis ordenó construir el Castillo, cuya Torre de Homenaje se convirtió en el ex-libris de la ciudad.
Beja vivió momentos nuevos de dinamismo durante el siglo XV, cuando el rey D. Afonso V creó el Ducado de Beja y lo cedió a su hermano, el Infante D. Fernando. El rey D. João II nombró Duque de Beja a su primo, futuro rey D. Manuel I. Desde entonces, el ducado quedaría siempre en manos de los segundos hijos de los reyes. El mecenazgo regio quedó marcado por algunos monumentos que merecen ser visitados, concretamente el Convento de Nuestra Señora de la Concepción, la Iglesia de la Misericordia, el Convento de San Francisco, actualmente convertido en Pousada, la Iglesia de Santiago y la Iglesia do Pé da Cruz.
Para descubrir la ciudad de Beja, la Región de Turismo promueve el programa "Sons do Tempo", según el cual se guía al visitante con la ayuda de auriculares. Se aconseja visitar la ciudad en el mes de marzo, cuando tiene lugar la Ovibeja, una feria en que la producción agrícola regional sirve de pretexto para dar a conocer la cultura, la etnografía y la economía de la región.