Restaurantes y Cafés

Pasando Lavre, en la carretera que comunica Montemor-o-Novo con Coruche y en la curva que enlaza con la de Vendas Novas, hay una casa de una sola planta, fachadas blancas y zócalos azules, pequeños toldos y un cartel que identifica uno de los más populares restaurantes de la región: Maçã. La entrada da hacia la cafetería, a la izquierda, y hacia el restaurante, a la derecha. El salón es amplio con suelo de gres, zócalos de azulejo, mesas de madera, sillas alentejanas con asientos de anea, mantelería de tela, decoración sencilla que incluye las críticas gastronómicas enmarcadas, una pequeña barra con entrantes: quesos frescos de Vendas Novas, Queso de Évora DOP, torreznos, champiñones salteados y otros. 

La carta ocupa un folio bien lleno, con más de una decena y media de “platos del día”. La especialidad de la casa es el cordero al horno, plato de los fines de semana, y que tiene sus incondicionales apreciadores. Otros casos exitosos son el solomillo de cerdo con migas de espárragos, la carrillada de cerdo alentejano con patatas fritas redondas o con puré de manzana, la cabidela de gallina, el ensopado y el arroz de liebre, el conejo de monte frito, la perdiz estofada, entre otras delicias preparadas con gran sencillez y mayor rigor culinario. Lo mismo se puede decir de los postres, hechos en casa, entre los que sobresalen la sericaia con Ciruela de Elvas DOP, el flan de almendras y naranja y, en su tiempo, los membrillos asados. Carta de vinos alentejana con un blanco del Duero como excepción y algunos verdes. Cabe destacar el vino de la casa, debidamente etiquetado con la marca “Maçã”, producido por la Adega Mayor, de Campo Maior.