Castelo de Vide
Castelo de Vide
Localidade
El castillo rodeado por las casas blancas se destaca en el paisaje y es sin duda la primera sorpresa para el visitante. Desde lo alto, el paisaje alentejano adquiere todo su esplendor. Pequeñas aldeas en medio de los campos se pierden en el horizonte. Muy cerca de allí, a unos 20 km, asoma Marvão y un poco más allá se avistan las tierras de España.
En la ladera norte, entre el Castillo y la Fuente de la Villa, una serie de calles más estrechas delimitan el núcleo histórico de la Judería. La Judería de Castelo de Vide es uno de los ejemplos más importantes de la presencia de los judíos en nuestro país, remontándose al siglo XIII, tiempo de Don Dinis. Allí podemos encontrar una de las mejor conservadas juderías de Portugal, incluida desde hace ya algunos años en un programa de recuperación de edificios y de revitalización, donde se conserva uno de los mayores tesoros de arquitectura civil del periodo gótico.
Pasee pues, sin meta, por esas calles escarpadas y estrechas y déjese llevar por el encanto de su memoria medieval.
Pero Castelo de Vide tiene otros monumentos que vale la pena visitar. Hablamos por ejemplo de la Capilla del Salvador del Mundo, la más antigua (finales del s XIII) cuyo interior está cubierto de paneles de azulejos azules y blancos, o de la Capilla de San Roque construida en el s.XV y reconstruida en el s.XVIII. Pero éstas son solamente dos de las 24 iglesias existentes.
Si aún tiene tiempo y ganas, puede subir al monte cercano al Castillo de Vide, donde está la Capilla de Nuestra Señora de Penha e desde donde tiene otra perspectiva del pueblo.
Castelo de Vide siempre ha sido conocida por sus riquezas naturales especialmente por los balnearios, cuyo agua tiene propriedades terapéuticas. Puede encontrar varias fuentes siendo la Fuente de la Villa y la Fuente de Mealhada las más conocidas. Sin embargo aquí hay que llamar la atención sobre un punto. Sepa que, según los dichos populares, quien bebe del agua de la Fuente de Mealhada volverá al Castillo de Vide para casarse.
En la ladera norte, entre el Castillo y la Fuente de la Villa, una serie de calles más estrechas delimitan el núcleo histórico de la Judería. La Judería de Castelo de Vide es uno de los ejemplos más importantes de la presencia de los judíos en nuestro país, remontándose al siglo XIII, tiempo de Don Dinis. Allí podemos encontrar una de las mejor conservadas juderías de Portugal, incluida desde hace ya algunos años en un programa de recuperación de edificios y de revitalización, donde se conserva uno de los mayores tesoros de arquitectura civil del periodo gótico.
Pasee pues, sin meta, por esas calles escarpadas y estrechas y déjese llevar por el encanto de su memoria medieval.
Pero Castelo de Vide tiene otros monumentos que vale la pena visitar. Hablamos por ejemplo de la Capilla del Salvador del Mundo, la más antigua (finales del s XIII) cuyo interior está cubierto de paneles de azulejos azules y blancos, o de la Capilla de San Roque construida en el s.XV y reconstruida en el s.XVIII. Pero éstas son solamente dos de las 24 iglesias existentes.
Si aún tiene tiempo y ganas, puede subir al monte cercano al Castillo de Vide, donde está la Capilla de Nuestra Señora de Penha e desde donde tiene otra perspectiva del pueblo.
Castelo de Vide siempre ha sido conocida por sus riquezas naturales especialmente por los balnearios, cuyo agua tiene propriedades terapéuticas. Puede encontrar varias fuentes siendo la Fuente de la Villa y la Fuente de Mealhada las más conocidas. Sin embargo aquí hay que llamar la atención sobre un punto. Sepa que, según los dichos populares, quien bebe del agua de la Fuente de Mealhada volverá al Castillo de Vide para casarse.