Monchique
Monchique
Localidade
Las casas tienen la arquitectura tradicional del Algarve en las paredes blancas, en las canterías, en las manchas de color de las puertas y ventanas, aunque exhiban las típicas "chimeneas de falda" tan diferentes de las del litoral.
Las calles escarpadas y estrechas dejan ver a cada paso nuevas perspectivas sobre la vegetación de la sierra, mostrando un cierto exotismo, aumentado por la presencia de canelos y hortensias, de árboles frutales, evocadores de jardines y arboledas: es la excusa ideal para una larga excursión de exploración de un rincón diferente del Algarve.
Monchique merece ser visitada a pie, ya que para apreciar sus encantos es necesario subir y bajar las calles, asomarse a los amplios horizontes que aparecen por entre las casas, descubrir rinconcitos de luz y tranquilidad. Al final le quedará el recuerdo de una ciudad de la sierra con historia y carácter a la que apetece volver.
Las calles escarpadas y estrechas dejan ver a cada paso nuevas perspectivas sobre la vegetación de la sierra, mostrando un cierto exotismo, aumentado por la presencia de canelos y hortensias, de árboles frutales, evocadores de jardines y arboledas: es la excusa ideal para una larga excursión de exploración de un rincón diferente del Algarve.
Monchique merece ser visitada a pie, ya que para apreciar sus encantos es necesario subir y bajar las calles, asomarse a los amplios horizontes que aparecen por entre las casas, descubrir rinconcitos de luz y tranquilidad. Al final le quedará el recuerdo de una ciudad de la sierra con historia y carácter a la que apetece volver.