En la ciudad fundada por el emperador romano Augusto hace más de dos mil años, es posible realizar un itinerario accesible, de forma segura y cómoda.

En el centro histórico, la mayor parte de las calles es llana, el pavimento es regular y se encuentra en buen estado de conservación, lo cual facilita la circulación. Además, existen muchas calles peatonales y espacios verdes en los que se puede descansar a mitad de recorrido. Los pasos de peatones se encuentran rebajados y, en su mayoría, también están nivelados, lo cual garantiza un trayecto continuo. Solo algunos disponen de señalización táctil y luminosa, o acústica, no obstante, se encuentran correctamente señalados, lo cual reduce el riesgo asociado a estas situaciones.

Siga este itinerario con el mapa

Arco de Porta Nova (Arco da Porta Nova) (1) – Iglesia de Pópulo (Igreja do Pópulo) (3) - Museo de los Biscainhos (Museu dos Biscainhos) (2) – Catedral y Tesoro de la Catedral (Sé e Tesouro da Sé)  (4) – Capilla de Nuestra Señora de la Torre (Capela de Nossa Senhora da Torre) (5) – Iglesia de Santa Cruz (Igreja Santa Cruz) (10) – Iglesia de San Marcos (Igreja São Marcos) (11) – Palacio de Raio (Palácio do Raio) (12) – Jardín de la Avenida Central (Jardim da Avenida Central) (15) – Basílica de los Congregados (Basílica dos Congregados) (14) – Iglesia de Lapa (Igreja da Lapa) (7) – Castillo de Braga (Castelo de Braga) (8) - Jardines de Santa Bárbara (Jardins de Santa Bárbara) (6)



Para comenzar el itinerario, sugerimos simbólicamente el arco de Porta Nova (Arco da Porta Nova) (1), que también recuerda una de las entradas de la antigua muralla medieval. Siguiendo por la primera calle a la izquierda (Rua Dom Frei Caetano Brandão), encontramos los primeros puntos de interés del recorrido. En la Iglesia de Pópulo (Igreja do Pópulo) (3), del s. XVI, con entrada accesible y amplio interior, cabe mencionar la decoración del s. XVIII en la que destacan los paneles de azulejo en azul y blanco. Saliendo de la iglesia, tome por Rua dos Biscainhos donde encontrará un antiguo palacio del x. XVII, actualmente el Museo de los Biscainhos (Museu dos Biscainhos) (2), en el que se puede ver una importante colección de artes decorativas del s. XVII al s. XIX.

Retomando Rua do Arco da Porta Nova, si tiene tiempo, también puede entrar en el Museo de la Imagen (Museu da Imagem) y, después, seguir de frente por la calle peatonal que será el eje central del recorrido. En la segunda manzana, le sugerimos tomar a la derecha, por Rua do Cabido, para llegar a la Catedral (Sé) de Braga (4).



La construcción en el s. XII de la Catedral más antigua de Portugal y un emblema de la ciudad se debe a D. Henrique y D.ª Teresa, padres del primer rey de Portugal, Alfonso I. Con un entorno y una entrada accesibles, sin duda, merece la pena la visita. Salvando una pequeña escalinata, es posible acceder al Museo del Tesoro de la Catedral (Museu do Tesouro da Sé).

Saliendo de la catedral, tome a la izquierda hasta llegar a la capilla de la Señora de la Torre (Capela da Senhora da Torre), construida en el s. XVIII como agradecimiento porque Braga no se vio afectada por el terremoto de 1755. En el edificio adyacente se encuentra el Museo Pío XII (Museu Pio XII). La Capilla resulta de difícil acceso debido a una escalinata en la entrada y a barreras puntuales en el interior. Del lado izquierdo de la Capilla, atraviese el arco hasta Largo de Santiago y, de nuevo a la izquierda, siga por Rua do Anjo. Al final de la calle, en Largo Carlos Amarante, se encuentra la Iglesia de Santa Cruz (Igreja de Santa Cruz) (10), del s. XVII, y la Iglesia barroca de San Marcos (Igreja de São Marcos) (11), del s. XVIII. Detrás de la iglesia se encuentra el emblemático Palacio de Raio (Palácio do Raio) (12), un ejemplo único de la arquitectura del s. XVIII, sede actual del Centro Interpretativo de la Memoria de la Misericordia de Braga (Centro Interpretativo das Memórias da Misericórdia de Braga).

Siguiendo por Rua do Raio, encontrará a la izquierda la Avenida da Liberdade, peatonal, y el agradable jardín de la Avenida Central (Jardim da Avenida Central) (15), perfecto para unos momentos de descanso, con varios restaurantes, terrazas y tiendas, como el histórico café A Brasileira (9). En el medio de la Avenida do Jardim, puede visitar la Basílica de los Congregados (Basílica dos Congregados) (14), de estilo rococó, obra de André Soares, un arquitecto del s. XVIII, referente en el patrimonio arquitectónico de Braga.

En el extremo del jardín, desde Largo do Barão de São Martinho se llega fácilmente a Rua do Souto y se encuentra a pocos minutos de la Iglesia de Lapa (Igreja da Lapa) (7) y del castillo medieval de Braga (Castelo de Braga) (8), del que solo queda la Torre del Homenaje, una de las cinco torres que defendían la ciudad.

Se retoma así el eje principal del itinerario, que lo lleva de vuelta a Porta Nova, pudiendo pasar también por los jardines de Santa Bárbara (Jardins de Santa Bárbara), cerca de Praça do Município. Un punto de descanso habitual en los paseos por la ciudad.

Durante la visita a la ciudad, pasará por muchos otros monumentos que reflejan la importancia de Braga como uno de los principales centros religiosos de Portugal, que forma parte de las rutas marianas y del Camino de Santiago. Las celebraciones de Semana Santa, muy importantes en el calendario litúrgico, atraen normalmente a muchos visitantes a la ciudad.

Cabe mencionar que el itinerario podrá completarse con una visita al Museo de Arqueología D. Diogo de Sousa (Museu de Arqueologia D. Diogo de Sousa), cuyas instalaciones son accesibles. Aunque se encuentre alejado del centro histórico, resulta importante para conocer la historia de la ciudad, sobre todo con respecto a su origen romano. El nombre del museo es un homenaje al arzobispo del s. XV (1461-1532) al que se debe la reedificación de la ciudad y la recopilación y el estudio de gran parte de los restos arqueológicos.