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Cerca de Rio de Moinhos, una de los municipios del término de Borba, encontramos el Monumento de Montes Claros situado en un otero de la "Herdade de Travassos".

El Monumento conmemora la victoria portuguesa en la Batalla de Montes Claros, victoria obtenida en 1665. Fue la última gran lucha de las Guerras de la Restauración de la Independencia, iniciadas por D. João IV, y que terminaron con la firma del acuerdo de paz entre Portugal y España, en 1668, durante la regencia de D. Pedro II. El monumento fue erigido ese mismo año por orden de D. António Luís de Menezes, Marqués de Marialva y Conde de Cantanhede, que lideró con valentía la batalla en calidad de capitán.

Hecho con el mármol blanco de la región, está rematado por una corona real cerrada de metal. En la base, una inscripción en la que D. António rinde homenaje a todos sus compañeros combatientes. El espacio circundante está protegido por una reja. 

Muy cerca de allí, a unos 2 km, encontramos la Ermita de la Virgen de la Victoria, cuya construcción fue ordenada por el príncipe regente D. Pedro II. Por voluntad de su fundador, está dedicada a las Almas del Purgatorio, en memoria de los soldados que aquí perdieron la vida. El templo, sin ningún elemento artístico destacable, vale la pena ser visitado por su localización en una zona elevada, desde donde se avista la Sierra de Osa y las canteras de mármol, transformándose así en un agradable mirador sobre el paisaje de la región.