Restaurantes y Cafés

Heredó las instalaciones de otro restaurante, pero cambió todo, desde el nombre hasta la decoración y el concepto de cocina, ahora genuinamente alentejana. El espacio es pintoresco: salón amplio, barra, bar, cocina abierta, decoración rústica en la que destacan, a la par de los aperos de labranza, una pintura naif en la pared y un burro de tamaño real junto a una columna, mesas de madera, sillas con asiento de anea y manteles de cuadros de tela con cubremanteles de papel blanco. El ambiente es alegre y relajado. La cocina, al cargo de Teresa y José Parrinha, que han pasado por varios restaurantes de cocina alentejana antes de llegar a O Moinho, se caracteriza por la elaboración y presentación casera de los platos típicos de la región. 

La carta se basa en platos del día, que son dos o tres por lo menos, uno de los cuales siempre es cerdo alentejano. Entre los más populares están las migas alentejanas con costillas fritas u otros cortes de cerdo alentejano a la parrilla, los abanicos y los secretos de cerdo alentejano a la parrilla con patatas fritas, arroz y ensalada, el jabalí estofado, el bacalao de la casa, que se hace al horno con una base de cebolla, o à lagareiro, a la parrilla, con guarnición de patatitas tempranas asadas con su piel regado con aceite de oliva alentejano, y los cocidos de garbanzos y alubias que nunca faltan los sábados. Como entrantes, quesos de oveja y embutidos alentejanos, como el lomo. Repostería casera donde destacan el flan de huevo, el postre de la casa, el arroz con leche y la mousse de chocolate. Carta de vinos alentejana, excepto algún que otro vino de la región de los vinos verdes. Servicio familiar y simpático.